Quizás el viento, o el ruido, o el calor en aquellos momentos acompañó mi viaje hacia las entrañas del dolor humano. Hiroshima, Nagasaki se hicieron presente, pero también nuestra historia de horrores en Latinoamérica. Dictaduras, genocidios, torturas. Todo se fusionaba para dejar al público atónito, con muchas o varias emociones encontradas, expulsadas o gritadas en el momento mismo, en aquel perpetuo instante de vida y muerte...
1 comentario:
Eres un ser hermoso y aunque en esta foto casi no se te ve...es como una sombra...siento tu luz...
más de una vez sentí el deseo de escribirte alguna cosa pero no lo hacía, ahora nosé ¿pq? ni ¿para qué? pero creo q algo tiene q ver con decir lo que uno siente...
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